La empresa valenciana Robotnik, dedicada a la fabricación de "robots a la carta", ha despertado el interés del mercado internacional y ya casi la mitad de su facturación tiene como destino clientes de Europa, China y América, entre ellos la marina de los Estados Unidos, que ha comprado algunos de los modelos. Uno de los socios fundadores de Robotnik, Roberto Guzmán, ha explicado que la empresa, que el año pasado facturó 2 millones de euros, vendía originariamente sus productos en España, pero los efectos de la crisis les han obligado a volcarse en la exportación.
Robotnik es una empresa dedicada al desarrollo de productos y servicios de ingeniería e I+D en el área de la robótica mediante el diseño, fabricación y comercialización de productos y sistemas basados en tecnología robótica.
Además de la fabricación de robots "a medida" de las necesidades del cliente, Robotnik cuenta con siete modelos de robots propios, la mayoría plataformas móviles o brazos modulares, capaces de actuar en entornos adversos, en zonas contaminadas e incluso algunos están preparados para detectar explosivos.
Sus máquinas son utilizadas para aplicaciones tan dispares como para transportar carros en centros hospitalarios o para operar en el interior de tuberías, realizar tareas de mantenimiento e inspección en centrales nucleares, entre otras utilidades, y cuentan con un software abierto para que las entidades que los adquieren puedan programarlos libremente.
Sus robots autónomos de transporte para logística intrahospitalaria son plataformas autónomas que pueden transportar hasta 500 kilos de carga. Entre sus funciones figuran eliminar el riesgo humano en el acercamiento a elementos peligrosos y servir de apoyo en la extinción de incendios.
Entre sus productos figuran robots móviles, manipuladores móviles, brazos y manos robóticas, humanoides, sensores de fuerza, pinzas robóticas y robótica modular.
No obstante, el producto estrella de la empresa es el Summit XL, ya que ha sido el más vendido por todo el mundo, principalmente en Europa y los Estados Unidos, útil para aplicaciones de investigación, vigilancia o motorización remota, según ha explicado Guzmán. Se trata de una especie de "pieza base" a la que se le pueden añadir módulos o brazos articulados para la realización de diferentes actividades.
Posee dos diferentes tipo de ruedas, que se pueden intercambiar con rapidez, para que el robot pueda trabajar tanto en lugares cerrados como en abiertos.
Gracias a un sistema de suspensión independiente, puede sortear cualquier tipo de obstáculo y es capaz de alcanzar una velocidad de tres metros por segundo.
El director de I+D de la empresa, Rafael López, ha apuntado que ante la crisis han visto la necesidad de expandirse y conseguir un mercado más amplio para comercializar sus productos y para ello están cooperando con empresas estadounidenses, entre otras.
Fundamentalmente los robots que fabrican en esta empresa son aplicaciones de investigación tanto civil como militar y entre sus principales clientes destacan la US Navy, la Royal Military Academy de Bruselas o el STL del Reino Unido.
Fuente:
http://www.lasprovincias.es/20130629/economia/robotnik-valencia-vende-marina-201306291241.html